domingo, 1 de mayo de 2022

Las Madres olvidadas

 

Hoy hablo de las madres olvidadas.

Nosotras hemos tenido que aprender a vivir solo con el recuerdo, cada día más borroso, de aquellos días felices, marcados por la entrega de incalculable dosis de amor incondicional.

Hay madres de diversos tipos: madres que se dedican al hogar, las que tienen que salir a trabajar por necesidad o porque desean desarrollarse profesionalmente.

Las que han dejado sus sueños a un lado para convertirse en cuidadoras absolutas de sus vástagos, las independientes, las madres solteras, las emprendedoras, las abandonadas por sus maridos, las exitosas, las abnegadas, en fin, a todas:

FELIZ DIA DE LA MADRE

No obstante, con suma tristeza debemos aceptar que hay madres que han sido olvidadas, pues no todos lo hijos piensan así, o bien, son incapaces de demostrar algo de respeto y consideración, aun cuando todavía están a tiempo de hacerlo.

Las que hemos sufrido frialdad, indiferencia e ingratitud de nuestros propios hijos.

Esos seres que cuidamos, protegimos y por quienes nos sacrificamos durante muchos años desde que nacieron, al crecer optaron por alejarse, por abandonar a su suerte a quienes les dieron la vida, dejando una amarga sensación de vacío y soledad.


3 comentarios:

  1. Madres olvidadas

    Tras la ventana,
    al igual que otras puertas y ventanas
    como duelen
    esos ojos secos
    desvelados en auroras
    sin amor, sin mañana.

    Como sufren en vida las madres,
    parturientas de llanto y amor
    que por siempre
    cargando la cruz le dejaran.

    Llama a sus hijas, ya son madres,
    tanto tardan hijas que no vienen,
    como duele tu ausencia, como sufro
    y se alargan mis tardes.

    Recuerda a sus hijos, ¡ah! mis hijos
    a veces, a veces,
    a veces, cuando pueden
    dos monedas por minuto
    me llaman.

    Los nietos mmm, si los nietos,
    enfermizos, llorones, atrevidos,
    olvidan el amor y desvelo recibido
    de la que abusaban de nana,
    ellos hoy caminan sus amores
    por calles y plazas, sin querer visitarla.

    La madre en un asilo abandonada
    en eternas horas tan vacías
    se rebosa en angustia,
    esperando visitas que feliz la harían,
    para acortar el tedio de su vida, sin vida.

    Las piadosas manos de su alma
    amasaron el pan familiar de cada día,
    hoy, vacías, moradas, las retuerce,
    llenas de ausencias,
    ayer, haber sido la madre tan querida.

    Como duele ese amor que se agrande
    mientras muere, y esos ojos secos que
    nos llaman,
    ya no tiene lágrimas,
    porque llora su alma.


    Cruje la puerta, mira las ventanas,
    ¿Quién viene? Su rostro se ilumina
    de alegre esperanza,
    el viento entra, revolotea,
    besa su rostro, y pasa.

    ¡Como sufren su abandono
    las madres olvidadas!



    (Oscar Mellado Norambuena)

    PD: El dolor causado por el olvido de los hijos, no debe hacer que toda madre olvide el cariño y la entrega que ellas dedicaron a sus hijos. Su entrega por su prole primero, y por las nuevas generaciones después, fue y continua siento total hasta el último suspiro de su vida.

    ¡Gracias mamá!.
    ¡Gracias madres! por tanto cuanto os habéis entregado por vuestros hijos :-)

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  2. bueno que ha pasado aquí? ya no sale el autor del comentario publicado.
    Pues este lo ha subido Jomaral ¡Alaaa!

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    1. Amigo, que todo está muy raro. Gracias por tus palabras, de verdad que ayudan a muchas madres. Bssos.

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Por favor, todo comentario o escrito CONSTRUCTIVO, espero entre todos no avergonzarnos de ponernos al nivel de los que no queremos.
Gracias