jueves, 7 de julio de 2022

Un despropósito de concentración

 



TODA UNA ODISEA

Sábado 00:00 horas salimos de Pamplona en autobús, de noche para intentar dormir lo máximo posible en ese viaje largo Pamplona-Puerto Banus.

27 menores, 10 adultos.

Todos competidores para la Final Nacional en Marbella.

Con todo programado para llegar, y poder aprovechar el tiempo para poder repasar antes de la gala.

Viaje terrible para los mayores, aun viendo 3 películas, parando todo lo necesario, la impresión era que llevábamos varios días de viaje.

Y por fin llegamos a destino, creo que alrededor de las 12:00 horas.

El chofer nos dijo que era justo a la vuelta de la esquina.

Todos en fila, bajo un sol de justicia, con todos coches alrededor circulando, nos dirigimos hacia la entrada.

Preguntamos a una muchacha que salía del complejo y su respuesta fue, todo es el mismo complejo, ¿en qué fase estáis?

Ni idea, dejamos a todo el grupo y nos fuimos 2 a las oficinas a preguntar.

Nos atiende un chico no sé si muy amable diciendo que a ver si hablábamos ingles, bueno, o algo parecido.

Pues no, imposible entendernos con él y al rato aparece otro operario con bastante idea de nuestro idioma.

Nos identificamos y dice que primero la fianza, 1.500,00 €.

Nuestra responsable dice que ya hemos puesto la fianza de 400,00 € que se exigía.

Dice que no, que ahora son 1.500 €

Le damos una tarjeta, no la acepta su programa, otra, tampoco, vamos hasta el grupo y se acercan con 2 mas, tampoco.

Dice que bueno, que ya lo arreglaran y empezamos con el tema de los apartamentos.

Teníamos 9 de ellos y en nuestra mente nos creíamos poseedores de la mitad del complejo.

Nos dice que solo 2 están preparados, que el resto nos ira avisando.

Cogemos un plano de la urbanización con los puntos marcados de los apartamentos.

Era como el plano de Madrid con un punto amarillo en cada esquina.

Lo malo que entre punto y punto podían ser más de 1 ó mas kilómetros.

Nuestra idea era haber llegado, dejar las cosas, y como había un mercadona en el complejo, hacer la compra y preparar barbacoa para todos antes de ir a descansar.

Pregunto al operario y me dice que no, que no hay.

No importa ya buscaremos solución pero en la web se veían en los jardines.

Vamos a recoger a la prole para ir al primero, dejar todo e intentar ver como comer.

Después de recorrer calles y calles, todas iguales, las mismas fuentes (prohibido beber porque tenía cloro o lejía el agua) sin nadie que nos dirigiera y volviendo a la salida sin querer, alguien responsable del grupo se va a buscar al operario para que nos ayudara.

Todos los pitufos enfadados, cansados, hambrientos y bajo el sol sin árboles que nos ayudaran, solo palmeras muy altas que no nos ofrecían su sombra.

Aparece el muchacho y todos en marcha otra vez, con nuestros carros, mochilas y bolsas.

Después de andar otro par de kilómetros nos dice que perdón, me he equivocado, no está en esta fase, todos media vuelta.

Como en una de esta volvíamos a pasar por los 2 restaurantes existentes, me paré para ver que ofrecían y los precios.

Prohibitivos, por supuesto que los mayores lo hubiéramos pagado, pero los chiquitos, el presupuesto que traían, no estarían dispuestos a pagar 18,00 € por una hamburguesa.

Fui avisando a los adultos y le preguntamos al responsable si podríamos comer todos juntos en una de las piscinas, nos dijo que sí, que la piscina que correspondía al apartamento que íbamos era la más grande  y podíamos juntarnos allí.

Por fin llegamos a uno, dejamos todos los carros dentro excepto los del segundo apartamento y en marcha como borregos de uno en uno puesto que las aceras eran muy estrechas y la carretera llena de coches que iban y venían sin descanso.

¿Por qué las carreteras? Porque entre un apartamento y otro había que salir abriendo una cancela y coger la calle para buscar otra fase que estaba a tomar por c……..

Llegamos al segundo, casi sin mirarlo, dejamos todo, casi eran las 14:00 y el calor, sed y hambre nos tenía derrotados.

Hablamos y nos dirigimos de nuevo al centro del complejo, que era Mercadona.

Entramos responsables de cada grupo y nos fuimos al punto caliente.

Hicimos una compra de más de 260,00 € de comida y bebida y todos con la carga en bolsas, con garrafas enormes de agua, nos fuimos hacia la piscina, viaje largo, parecía que no llegábamos nunca.

Y por fin, tras abrir con llave la cancela de entrada y la de la piscina, olé, llena porque había una despedida de no sé que, imposible meternos nosotros.

Hablamos y recordamos que habíamos dejado atrás una zona abierta con medias sombras para poder comer en la hierba.

Uff, que guay, sacamos todos los taper, pollos, bebidas, croquetas, ensaladas y cuando empezábamos a hincar el diente, aparece uno de mantenimiento y nos dice que nos levantemos, que las zonas comunes no se pueden usar para comer.

Le comentamos que el responsable nos ha dicho que podíamos y dice que ni hablar, que nos levantemos y despejemos todo.

Y de repente, un giri sale al balcón y grita “LLAMA A LA POLISIA”

A quien hacemos que llame es a su jefe, se pone y nos responde que no nos había entendido, que en el exterior de los apartamentos ni se puede comer ni usar para otra cosa que no sea de camino a los apartamentos.

Recogimos todo, de malas maneras, y en unos minutos lo dejamos limpio total.

Con ganas de llorar, el calor no dejaba de fustigarnos para hacer más difícil la situación.

Nos dieron otras dos llaves y como pudimos repartimos a los chicos a comer en los apartamentos.

En un momento dado, me quede sola en medio del laberinto, con una garrafa de 8 litros de agua y mi mochila.

Abrí la misma para coger el móvil y me vinieran a rescatar, pero ¿Qué más podía pasar? La mochila no era la mía, había un móvil imposible de utilizar al no poderlo encender.

Empecé a seguir un camino y otro, fuentes y mas fuentes, encontraba candelas, viendo la carretera al otro lado, pero cerradas con llave, llave que yo no tenía y vuelta a buscar una salida.

Mas y mas de lo mismo, y cuando estaba con un ataque de claustrofobia y a punto de abrir la garrafa y ducharme con ella en mitad de uno de los caminos, no me importaba el castigo, oí voces conocidas que salían de un balcón. Grité y vi una cara amiga, fue como ver la luz al final del túnel.

Nadie me había echado en falta, todos creían que estaba con otro grupo.

Allí estaba la comida sobre las mesas, pero mi cuerpo solo admitía agua.

Llegamos a través de los móviles que todos estaban controlados y derrotados los de mi apartamento “Las Premium” nos pusimos en marcha. Logré que me cambiaran mi mochila (todos llevamos la misma de la academia) y nos fuimos al desierto camino de nuestra casa.

Viaje terrible, eterno, calor, cansancio, hartura, pensando en mi cabeza, que coones hago yo aquí.

Llegamos a una cancela de salida, cerrada, y como no era nuestra fase, no teníamos llave, les dije, tranquilos, alguien saldrá, vamos a sentarnos en la fuente y nos refrescamos con la lejía.

3 cigarrillos después, se nos apareció el diablo, alguien metía la llave.

Salimos como si nos persiguiera alguien y a la carretera, a buscar nuestra fase.

No sé ni cómo la encontramos, con el aire acondicionado puesto, parecía que habíamos llegado al cielo.

Cogí una esquina del sofá y les dije, a mi no me aviséis hasta mañana.

Me despertaron no sé ni a qué hora para decirme que ¡arriba! que nos vamos a la playa.

Ni de coña, ya me contareis, me mandáis una foto y me vale.

Me desperté bastante tarde, habían vuelto, duchado, cenado y cuando estaban de cháchara logré abrir los ojos.

Les saludé y me di la vuelta.

El domingo, día de la competición, me desperté como una rosa después de dormir horas y horas, era prontico y puse un whatsapp a ver quién me acompañaba a desayunar a la calle.

Dos compañeras se apuntaron, eran las 9:00 horas, yo había visto en los restaurantes por supuesto que en ingles que ponía desayuno completo, y no me había preocupado el precio.

Nos fuimos a buscar a nuestra compi, que estaba en la primera fase y nos la encontramos detrás de la cancela sin poder salir porque no le valía ninguna de sus llaves.

Cuando ya estábamos ideando por donde saltar la valla, apareció una muchacha muy amable que nos abrió.

Charlamos con ella, nos preguntó de dónde éramos, ella vive todo el año allí.

Le dijimos que nos íbamos a tomar un buen desayuno y se rió, nos dijo que abrían a las 13:00 horas.

Lo más cerca que tenéis es el Club de Golf que es posible que este abierto.

Se ofreció a llevarnos, y como 3 reinas nos subimos al coche.

Nos dejó allí, y después de darle mil gracias entramos en el CLUB, directas donde se veía el restaurante con movimiento dentro, pasamos la puerta y oímos “ESTA CERRADO, ABRIMOS A LA 1”

No me puedo creer que la gente desayune a la 1.

Y nos dicen, pero si queréis café en la tienda tienen de máquina.

Camino de la tienda pasamos al lado del carro de uno de los golfistas, quietas! les dije, vamos a hacernos una foto.

Meto la mano en mi mochila, y mi móvil no está, empiezo a sudar tinta y les digo llamarme, a ver si lo he metido en vuestras mochilas.

Pues no, la que contesta es nuestra conductora que al oírlo ha contestado, se había quedado en el asiento de atrás.

Nos dice que en un par de horas vuelve al complejo y nos llamará.

Hicimos la foto con otro móvil y les dije, venga a desayunar.

Entramos y el muchacho muy amable nos dice, si tengo café, de máquina.

Estupendo, nos sentamos en la terraza y el gran desayuno de domingo fue un café, sin zumo, sin tostada a palo seco, pero con buenas vistas.

Volvimos andando, un buen paseo y dijimos, a la piscina hasta la concentración de las 12:30

Piscina, con un cartel enorme con fotos, todo prohibido, todo, lo raro es que dejaran bañarse.

Nuestra piscina chiquita y con las 8 hamacas ocupadas por nuestros vecinos de fase que lo llenaban todo.

Yo les dije, prefiero mi ducha, por lo menos tendré más sitio.

Llegamos a la concentración, que era para ensayar antes de la gala y problemas, no había donde hacerlo, estaba prohibida la música en la calle, los jardines aunque fuera sin música prohibido pisarlos y en las carreteras imposible, los coches pasaban continuamente.

Miramos de ir a comer hacia la playa, pero eran más de 30 minutos andando para ir y otros tantos para volver, además donde nos íbamos a meter tantos, los que fueron a la playa miraron y el máximo aforo que había en el más grande era de 22.

Entonces pensando en la marcha, el no saber si íbamos a poder comer y luego la vuelta, no nos podíamos arriesgar a estar baldados para la gala.

Decisión, todos a nuestra casa, piscina para los pitufos, seguro que como molestarían les dejarían solos, y los mayores llamamos  a un chino  arroz, tallarines y rollitos para todos.

Fue un éxito, primero los mayores, y luego por turnos.

Comimos en sillas calientes (según se levantaba uno, se sentaba otro) pero como una gran familia, que es lo que somos.

Bañicos en la piscina, toda nuestra y a vestirnos para la gala.

Nos recogió nuestro bus y directos a Marbella, al Palacio de Congresos.

Ultima gala, mucho retraso, muchos nervios, mucho cansancio, pero lo conseguimos.

Nos trajimos un 1º premio, 2º premio y 3º premio.

Nos vamos todos a Atenas

Pero que sepáis que nos lo hemos ganado a pulso.

Si habéis llegado aquí leyendo, os prometo que tenéis el cielo ganado.

 

Ah! he vuelto porque se me había olvidado contaros en que se entretuvieron los chiquitos la noche del sábado.

Estuvieron entretenidos a la caza de la cucaracha, había para todos.

Me contaron que al final se fueron a dormir cansados, nunca se acababan.

Menos mal que yo no vi ninguna, creo que hubiera dormido encima de la mesa del salón.


3 comentarios:

  1. ¡ Menuda aventura! ¡ Premios merecidos !

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  2. Amiga yo he leído tu aporte hasta el punto final y he llegado a la conclusión que teníais bien merecidos los premios conseguidos:

    Lo que me sorprende es lo de los alojamientos, menudo lugar para perderse y no volver, cual Robinson Crusoe, en una larga temporada.

    Y los demás grupos de participantes en la competición también estaban alojados en el mismo complejo. Porque ya sería el colmo tener perdidos a la mayoría de los grupos participantes.

    Afortunadamente ya estáis en vuestra tierra y para descansar de la aventura, pues comienzan las fiestas ahí. Pues nada paciencia y esperar que llegue pronto el tiempo de vacaciones y recuperar fuerzas para continuar practicando Hip Hop


    Saludos:

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  3. Gracias Amigo! de vuelta a la rutina que es lo que mejor nos acoge. Un Abrazo!

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Por favor, todo comentario o escrito CONSTRUCTIVO, espero entre todos no avergonzarnos de ponernos al nivel de los que no queremos.
Gracias