La Fiscalía investiga las declaraciones de un cura que
acusó a la madre de las niñas de Tenerife de su muerte
Fernando Báez Santana aseguró que el
presunto asesino es otra víctima por la ruptura matrimonial y «la infidelidad»,
afirmando que Anna y Olivia estarían vivas si su madre no hubiera roto el
matrimonio
La Fiscalía Provincial de Las Palmas ha incoado de oficio
diligencias de investigación con el objetivo de verificar si en las
declaraciones vertidas por el párroco Fernando Báez Santana habría una infracción penal. Las pesquisas se han
iniciado tras la indignación social por sus testimonios en redes sociales y
medios de comunicación, en los que aseguró que el
presunto asesino de Anna y Olivia –su padre– era otra víctima por «la
infidelidad» de su madre, a la que culpó de la muerte por romper el
vínculo matrimonial.
«La indignación social generada por tales manifestaciones
y el común rechazo de que se han hecho acreedoras animan la presente
comunicación», sostiene la Fiscalía en un comunicado. No obstante, el
Ministerio Público defiende que la tramitación se llevará a cabo bajo «las
obligaciones de discreción y reserva» por «el respeto que exige el
inmenso dolor causado y el sentimiento de pudor ante el proceso de duelo que
vive la persona aludida».
Tanto en radio como en redes sociales, el
sacerdote ha realizado manifestaciones en las que considera que el presunto
asesino es otra víctima por la ruptura matrimonial y «la infidelidad»,
afirmando que las niñas estarían vivas si la madre no hubiera roto el
matrimonio porque «antes el hombre aguantaba a las mujeres aunque se volvieran
locas». Asimismo, llega
a decir que la
madre «recoge lo que sembró», considerando que
la vinculación de la madre de las niñas a una nueva relación de pareja es
«robar hijos».
“Quinto mandamiento de la Ley de Dios: No mataras”
ResponderEliminarEste mandamiento divino parece bastante evidente no matar a otro ser humano, pero más allá el texto disuasorio nos encontramos ante una llamada a velar por la vida del prójimo.
Ésta claro que este sacerdote conoce muy bien el contenido del mandamiento divino y no debería interpretarlos a su antojo. Me sumo a la indignación general por los comentarios en las redes sociales culpando a la madre las niñas de la acción cometida por el otro progenitor.
El responsable de la muerte – desaparición – de estos angelitos es su padre, y a él le pedirá cuentas la justicia si se llega a localizar y detener. De haber estado las niñas con la madre hoy seguirían con vida y disfrutando . con sus juegos infantiles.
Los problemas que tengan los adultos no pueden ser utilizados como escusa para causar sufrimiento a la otra persona, y mucho menos utilizar a los hijos para tal macabros fines.
No es de recibo que este clérigo bastante polémico en sus actuaciones, motivo por el que ha sido reprendido por la autoridad eclesial, se quiera convertir en juez y parte de este doloroso episodio.
No entra en su labor pastoral señalar la culpabilidad o inocencia de los progenitores, y sí entra en su labor la defensa de la vida conforme al quinto mandamiento de la Ley de Dios.
La Fiscalía Provincial de Las Palmas hace bien abriendo diligencias de investigación con el objetivo de verificar si en las declaraciones vertidas por el párroco habría una infracción penal. Confiemos que esta investigación lleve a buen puerto y este sujeto de cuenta ante la justicia de su actuación. Mucho me temo que la causa se termine por archivar por ser consideradas sus palabras como ‘libertad de expresión’
Saludos:
Mas que libertad de expresion es LIBERTINAJE.
ResponderEliminarSemejante sujeto no debería hablar en nombre de Dios, eso si que es una verguenza.
Abrazos Amigo! Tu y yo le lanzariamos al fondo del mas, seguro.