Carta desgarradora de
un ertzaina tras la muerte de su compañero en Bilbao
Un ertzaina, miembro de la Brigada
Móvil de la policía
vasca, ha emitido por mensajería móvil una carta abierta a sus
compañeros lamentando la muerte "de un compañero, un padre de familia de
51 años que tiene nombre y apellidos, Inocencio Alonso, debajo de ese buzo negro que
visto yo también tan orgulloso". El agente, que desea mantener su
anonimato, es ertzaina de base, y acudió a los altercados de anoche entre
ultras del Athletic
Club de Bilbao y del Spartak de Moscú en la furgoneta que circulaba
junto a la que transportaba a la dotación del ertzaina fallecido por fallo
cardiorespiratorio.
"El
compañero cayó al lado mío en la carga que se hizo en la campa de San Mamés… no
sé si por impacto de bengalas, piedras, botella o simplemente por la tensión de
ese momento y el equipo de protección que llevamos, que te roba hasta la última
brizna de oxígeno en momentos de máxima tensión. Te ahogas, te quedas sin aire
y encima nos golpeaban con barras de hierro y nos tiraban de todo", relata
el policía vasco. Su mensaje comenzó a circular este mediodía durante las
concentraciones de repulsa contra la violencia en el fútbol que
se han convocado en el País Vasco.
"Todos vascos"
El agente
señala culpables en su carta abierta: "No eran gente extranjera, no, eran
de Herri Norte y sus amigos los que provocaron lo de
ayer". En este mismo sentido han opinado diversos sindicatos policiales, e
incluso el delegado del Gobierno en el País Vasco, Javier de Andrés,
quien, en declaraciones a Onda Cero ha vinculado a los miembros de la peña
Herri Norte con la kale borroka: "Tienen experiencia en lanzar objetos a
la policía".
"No eran gente extranjera, no, eran de Herri Norte y sus amigos
los que provocaron lo de ayer"
El policía
antidisturbios vasco cuenta su versión de los incidentes de ayer señalando que
"eran todos vascos los que fueron a la caza de los rusos, y los únicos
responsables de lo ocurrió. Gente de aquí. Fueron de caza a por los rusos
armados, lanzándoles de todo, sin contemplar que ahí en medio hay familias con
gente mayor, niños… que gracias a la profesionalidad de mis compañeros no
salieron lesionados y que solo iban a ver el fútbol, su ilusión".
Alta tensión
El ertzaina se
lamenta de la muerte de Ino, su compañero, con tristes palabras: "Es duro,
a estas situaciones te acostumbras... a recibir botellazos, que te insulten,
amenacen o te intenten matar...pero NUNCA a perder a un compañero... No a ver
gente mayor llorando de miedo porque no pueden correr para salir de ahí
... No a ver cómo padres abrazan a sus hijos por temor a ser alcanzados con
algo... No a ver a gente impedida en silla de ruedas que les han dejado en
medio de todo al huir los que sí tienen piernas para correr".
Su carta
contiene el relato de un momento de alta tensión en las inmediaciones del
estadio de San Mamés, poco antes del comienzo del partido: "Hay
una cara y una mirada de gratitud de una señora que no se me
olvidará en tiempo. Una señora que estaba intentando escapar detrás
de mi línea, cuando recibí un botellazo en mi casco y hombro delante de
ella, que perfectamente le podía haber dado a ella
de no estar yo por
casualidad en su trayectoria. Esas mirada de terror en los ojos de la gente
normal marcan de verdad".
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