Y mientras una parte de la humanidad sufre las consecuencias de las guerras, la hambruna o las persecuciones raciales, los países ricos del primer mundo son incapaces de ponerse de acuerdo para la ayuda y protección de las personas inocentes que sufren a causa de dichos conflictos.
Ejemplos claros de esta sin razón anti humanitaria lo vemos en los países de la UE, en América del Norte o en algunos países asiáticos. Nadie quiere recibir a los desplazados que huyen de sus países por supervivencia o mejorar sus condiciones de vida.
Y entre tanto, los migrantes se ven atrapados en medio de dos frentes; de un lado los empujan a cruzar al país vecino y éste impide con medidas contundentes que lleguen a tocar suelo. Los desconsolados migrantes, personas humanas al fin y al cabo, están medidos en medio de una guerra de mensajes contradictorios en las redes sociales.
Un conflicto humanitario a las puertas de la frontera de la UE del que oiremos hablar por mucho tiempo, seremos testigos de la desesperación de los migrantes frente a la pasividad de las autoridades comunitarias y porque no decirlo, el aprovechamiento del gobierno de Ankara para sacar provecho económico de la desesperación de muchas personas sufrientes y desplazadas de su entorno.
Y mientras una parte de la humanidad sufre las consecuencias de las guerras, la hambruna o las persecuciones raciales, los países ricos del primer mundo son incapaces de ponerse de acuerdo para la ayuda y protección de las personas inocentes que sufren a causa de dichos conflictos.
ResponderEliminarEjemplos claros de esta sin razón anti humanitaria lo vemos en los países de la UE, en América del Norte o en algunos países asiáticos. Nadie quiere recibir a los desplazados que huyen de sus países por supervivencia o mejorar sus condiciones de vida.
Y entre tanto, los migrantes se ven atrapados en medio de dos frentes; de un lado los empujan a cruzar al país vecino y éste impide con medidas contundentes que lleguen a tocar suelo. Los desconsolados migrantes, personas humanas al fin y al cabo, están medidos en medio de una guerra de mensajes contradictorios en las redes sociales.
Un conflicto humanitario a las puertas de la frontera de la UE del que oiremos hablar por mucho tiempo, seremos testigos de la desesperación de los migrantes frente a la pasividad de las autoridades comunitarias y porque no decirlo, el aprovechamiento del gobierno de Ankara para sacar provecho económico de la desesperación de muchas personas sufrientes y desplazadas de su entorno.
Saludos:
Una vergüenza políticas.
EliminarParame este mundo, por favor, que yo me bajo.
Un abrazo Amigo!!!!