Tras mes y medio en el coche, el pamplonés Javier
durmió en una cama
De 65 años y 50 cotizados, ha logrado
que le paguen su jubilación y el jueves entró a vivir en una habitación
El jueves pasado Javier volvió
a despertar en su coche. Sería el último amanecer. Le habían avisado que ese
día cobraría la pensión de jubilación y también entraría a vivir en una
habitación en un piso compartido. Nervioso, entumecido por la postura y el cansancio
emocional tras un mes y medio en la calle, escribió unas palabras en su cuenta
de Facebook: “Hoy me siento vivo”, dijo. Acto seguido, mandó un mensaje al
grupo de whatsapp de la Asociación Apoyo Mutuo de
Pamplona: “Después de mes y medio hoy duermo en un cama en vez de
en el coche. Además, recibo mi pensión. No me dan nada, solo lo mío después
de 50 años cotizados y una sinrazón de sentirme invisible para todos los
estamentos oficiales. Hoy veo un pequeño rayo de luz. Os quiero dar fuerzas
para que sigáis con vuestros deseos. Pero nos queda Juan, tirado en la calle,
durmiendo en el coche. No podemos dejarlo dormir en el coche. Yo no lo voy a
hacer. Un saludo. Gracias a todos”.
A Javier le desahuciaron el 10 de febrero y desde entonces ha
vivido en su coche. La noche anterior a que tuviera que dejar
su piso de alquiler, se levantó a las seis de la mañana, metió en el vehículo
un juego de sábanas y mantas, donó casi toda su ropa y una televisión a Apoyo
Mutuo, y se dejó caer frente al volante. Y sin rumbo fijo, condujo en busca de
un lugar poco transitado por la comarca de Pamplona donde pasar la primera
noche. “Me convertí en invisible, porque ahora los desahucios son invisibles”.
#Este virus lo paramos unidos
ResponderEliminarHay veces en que la actitud de algún estamento de la administración provoca la indignación – y hasta incomprensión – por parte de los ciudadanos. Y el mosqueo puede ser mayor cuando escuchas a algún dirigente izquierdista reclamando para los emigrantes cuantos derechos pidan.
Y no es que este por negar derechos a nadie, pues todos somos personas y merecemos tener una vida digna y confortable. Pero en este aporte leemos la peripecia vivida por Javier, el cual ni en sueños podía imaginar ser protagonista de esta pesadilla.
Haber trabajado y cumplir con sus obligaciones fiscales y cotizaciones a la SS., y cuando llega el momento de percibir la jubilación, se tropieza con la inoperancia de la administración, hasta el punto de verse malviviendo en la calle.
Suerte que, algunas asociaciones, sin animo de lucro ni de politiqueo barato, como la Asociación Apoyo Mutuo de Pamplona, el hombre se vio amparado y acompañado en este amargo trago y se ha convertido en un ejemplo para muchas personas que se encuentran en situaciones similares a la suya y pueden sentirse esperanzados en que ellos también puedan alcanzar una solución por parte de la administración y ver resuelta su situación personal.
Saludos:
PD: Amigas, me he percatado que en blog ha desaparecido la opción de puntuar el comentario de entrada; me gusta, divertido, interesante…, ahora en su lugar la página nos deja las opciones de; enviar por correo, abrir un blog, o compartir en redes sociales; Twitter, Facebook, Pinterest.
Te habías percatado de este cambio.
No, no me había dado cuenta.
EliminarMe obligaron a actualizar la pagina, me cambiaron todo y tuve que volver a aprender a moverme por el.
Hoy miraré lo de las puntuaciones, a ver si soy capaz de rescatarlo.
Gracias Amigo por estar!
¿ Quién mira por los intereses de l@s autónom@s? ¡NADIE!
ResponderEliminarHay empresas que pueden llevar al día sus obligaciones fiscales, hay otras que se ven en apuros para pagar la SS.
¿Por qué al que no tiene se le exprime más?
A este señor le embargaron la cuenta, sin ton ni son. Muchos departamentos de ayuda al ciudadano pero... más de la mitad no valen para nada, puro postureo.
Sólo l@s sinvergüenzas tienen ayuda, (por lo menos en este país)
Pero intentaremos no cambiarnos a sinvergüenzas por las ventajas que conlleva.
EliminarLo que es una vergüenza es el Pais que soportamos.
Abrazos Anónimo!