El anuncio lo ha hecho Jean-Noël Etcheverry, uno de los detenidos el pasado 16 de abril en el sur de Francia. Fue una de las cinco personas vinculadas a una organización que fueron sorprendidas por la Guardia Civil en una operación, en colaboración con la Dirección General de Seguridad Interior (DGSI), cuando trataban de hacer desaparecer armas de ETA.
«ETA nos ha confiado la responsabilidad del desarme de su arsenal y, en la tarde del 8 de abril, ETA estará totalmente desarmada», ha declarado Etcheverry al diario «Le Monde».
Con esta declaración, ETA pretende acelerar el proceso de desarme, hasta ahora paralizado, después de que haya procedido ya al sellado de sus zulos. Los gobiernos español y francés se han negado a participar en este proceso de desarme.
Hasta hora, la banda terrorista ha intentado hacer este proceso a través de la llamada Comisión Internacional de Verificación, un grupo de expertos internacionales, y posteriormente con personas destacadas de la sociedad del País Vasco francés.
Verificadores internacionales
En la actualidad, las armas y explosivos de los que dispone ETA están distribuidos en zona de monte y en casas particulares. Prácticamente la totalidad del arsenal se encuentra en Francia desde hace años.
Varios cientos de personas pertenecientes a las organizaciones de la sociedad civil y cargos electos del País Vasco francés participarán en el desarme definitivo de ETA, según informa Le Monde en su edición digital.
Los encargados de la entrega de armas piden que las Policías francesa y española no lo impidan y que haya verificadores internacionales.
Según informan los cinco arrestados de «la sociedad civil» en la operación de Francia, que fueron posteriormente puestos en libertad, la Policía francesa solo requisó en diciembre el 15 por ciento del armamento de ETA. El 8 de abril se entregaría todo su arsenal, ahora disperso en zonas de monte y en casas particulares.
Entre el arsenal de Luhuso había una decena de subametralladoras Uzi, cerca de una decena de fusiles de asalto G-3 (fabricado por la marca alemana Hecler & Koch), más de veinte revólveres Smith&Wesson, armas Sig-Sauer de estrellas, Browning, cientos de detonadores, decenas de kilogramos de explosivos y municiones, cables, etc.
Entrega «con seguridad»
Los artífices de esta operación «inédita» pretenden tener la seguridad de que pueden actuar para la entrega de armas «sin ser perturbados» por actuaciones de las Policías de Francia o España, y advierten de que, si para proceder al desarme, corren el riesgo de ser encarcelados, posteriormente, «se está cerrando la puerta al proceso» de entrega de armas.
Asimismo, reclaman la garantía de que esas armas serán recogidas por el Gobierno galo y solicitan la presencia de «observadores imparciales» en el lugar para verificar el desarme.
Ojalá sea cierto¡¡¡
ResponderEliminarYo he dejado de creer en la HUMANIDAD. Extinguida como los dinosaurios, todo es poder, poder, y poder.
ResponderEliminarNo seas tan negativa. Seguro que hay mucha más gente buena de la que crees.
ResponderEliminarPropongo a Nieves que un día nos ponga todo noticias de gente buena.
Eliminar