El stress de nuestros medicos

 Sí, dicen que están estresadísimos.

Pero yo lo dudo.

He estado 10 días trabajando, con una tos terrible, un poco de fiebre y malestar general.

Vale, igual son los años, pero ese no es mi estado habitual.

Todos los días de 8 a 8:30 he intentado coger cita con mi medico.

Imposible, siempre comunicando.

Me pasé por la farmacia y me dio varias cosas, pero diciéndome que tenía que verme mi médico.

No se si noté mucha mejoría y seguí arrastrando mi cuerpo día a día.

El jueves, pensando en el siguiente fin de semana que venía, a las 8 como un reloj, empecé con mi móvil a intentar coger cita.

Misión imposible, igual de difícil que hablar con hacienda.´

Me cogí el bolso y al curro.

Con el aju aju entre en mi curro.

Mi jefe ya cansado de oírme y de verme como seguía, me dice, venga, no quiero que dejes el teléfono hasta que consigas una cita.

Cogí mi móvil y con el manos libres empecé.

Comunicar y comunicar, pero hacia las 9, ostras, me salió el mensaje "Está Ud. hablando con el Centro de Salud, si quiere que le contestemos en euskera, marque el 1, si no, espere, si necesita que le vea el médico urgente llame al 112 o acérquese a urgencias", musiquilla, y al rato otra vez repetitivo el mensaje. 

En la oficina, con la musiquilla de fondo, seguimos trabajando.

Casi a los 20 minutos salto el pipipi, me habían colgado.

Mi jefe me dijo, sigue, que no sea por intentarlo.

Con un síntoma mas de la enfermedad, la mala leche que estaba haciendo, comencé mi intento.

Pipipi, rellamada, pipipi, rellamada, hasta que me salió otra vez el mensajito.

Comenzamos de nuevo con nuestra música de fondo.

Y al gran rato, a que no sabéis que paso? pipipi, me colgaron.

Uff, la mala leche iba en aumento, y aun y todo mi jefe dijo, SIGUE INTENTANDOLO!

Y seguí, hasta que me salió el mensajito de marras.

Aunque no os lo creáis, de repente salió la voz de una señorita "Consultorio N.º 1 de Barañain, en que puedo ayudarle?

Joer, casi le pido el desfibrilador ese para volver a respirar por el susto que me había dado.

* Buenos días le digo, necesito que me vea mi médico.

* ¿Apellidos?

* Tal

* Puede venir Ud. a las 12:10.

* Muchas gracias.

Y yo pensé, como es posible que casi a las 11:00 tengan un hueco tan pronto, la verdad que me mosqueó.

A las 12 un compañero me lleva en la furgoneta a la puerta del Centro, creo que le daba un poco de pena.

Centro de salud casi vacío, imagen mas de una película de terror que de un centro de salud en hora punta.

Llego a mi sala de espera, vacía, me siento , miro el reloj y son las 12:03 y bajo mi mascarilla por haber hecho el esfuerzo de moverme empiezo con el ajuju casi para ahogarme.

Hasta las 12:15 no se abre la puerta para enseñar a mi médico, impoluto, tranquilo para decir mi nombre y apellido y darme paso adentro, no tenía ningún paciente anterior, de no ser que lo hubiera escondido en algún armario.

Me senté, le saqué todo lo que estaba tomando y que era incapaz de acostarme en la cama desde hacía mas de 10 dias.

Todo interesante, me pone el aparatico en el dedo, acaba y le pregunto ¿bien? NORMAL es su respuesta.

Como no dejo de toser, me imagino que tenía que hacer el paripé de auscultarme, 5 toques en la espalda con la ventosa y lo guarda. ¿Bien, se oye algo? NORMAL me responde.

Entonces se sienta y con un dedo de cada mano se pone a teclear los 3 minuto que no me ha mirado.

Me saca 3 medicinas nuevas, me dice como tomarlas y le pregunto ¿lo que tengo, dejo de tomarlo?

No, hasta que no se te acabe, sigue, no te hará mal.

Le digo, pero es que me tiemblan las manos, lo que nunca.

Bah, eso son pequeño efectos secundarios, cuando deje la medicación se le quitara.

Me levanto y le digo MUCHAS GRACIAS.

Minuto y medio para mirarme, 3 minutos de teclado y minuto para explicarme medicación.

Cumple total con la normativa.

Abrí la puerta y a que no sabéis que vi? LA SALA SEGUIA VACIA.

Parar este Mundo que yo me bajo.