Como veis, el domingo no tiene desperdicio.
Busco y busco noticias positivas y me es imposible.
Están logrando lo que persiguen, amilanarnos tanto que les sea mas fácil machacarnos con las botas.
Ayer tuve comida de trabajo, en el centro, las calles del casco viejo igual que en fiestas, todo era jolgorio.
Hacía mucho que no tenía una de estas reuniones, mi recuerdo era un disfrute de los platos con precios asequibles a todos los bolsillos.
Ayer me defraudaron, los entrantes pobres y los segundos platos de pena.
Lo único bueno la bebida, bien elegida.
Lo cardiaco fue la cuenta, si hubiera visto disfrute de la gente, hubiera sido mi buena excusa para defender el precio, pero no pude.
Pagamos y por lo bajini pensé "una y no mas Santo Tomas"
Lo que si me hizo gracia en la comida cuando un compañero me contó que su mujer estaba todo el día cocinando para guardar en táper cientos de raciones por lo que pueda venir.
Jiji, no se me ocurrió decirle que si viene un buen pepinazo no lo van a poder disfrutar, y con una apagón al revés, tendrán que comer y comer de seguido antes de que se ponga malo.
Yo pienso que debemos seguir nuestra vida lo mas normal posible, intentando disfrutar del día a día y si viene algo, que venga, ya sabremos torearlo como mejor sepamos.
Amigos, la vida sigue, disfrutemos de ello.
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