sábado, 25 de febrero de 2017

Pensionistas



1.135 euros frente a poco más de 750 euros. Esta es la diferencia que existe entre la pensión media del País Vasco y las de Extremadura y Galicia, por lo que los pensionistas vascos cobran casi un 50% más que los extremeños o gallegos.

Así está reflejado en el informe de pensiones de febrero elaborado por el Ministerio de Empleo y Seguridad Social, documento en el que se observa que la pensión media en Extremadura apenas alcanza los 762 euros, mientras que en Galicia la cifra es de 773 euros. De esta manera, estas dos regiones son las únicas que no llegan a los 800 euros mensuales y se quedan muy lejos de los 915 euros en los que está la media nacional. Por su parte, los pensionistas del País Vasco perciben los señalados 1.135 euros y son los que tienen una mayor paga media en España. Y si se compara con la de extremeños y gallegos, la pensión de los vascos es, exactamente, un 48% y un 46% superior.

Otras regiones en las que la paga es sensiblemente superior a la del resto de CCAA son Madrid, Asturias o Navarra, todas ellas con una pensión media superior a los 1.000 euros. Y todavía por encima de la media nacional están Aragón, con 961 euros, Cantabria, con 960 euros, y Cataluña, con 950 euros.

Por la parte inferior, además de las señaladas Galicia y Extremadura, destacan Murcia y Andalucía, con unas pensiones medias de 804 y 822 euros, respectivamente. Por debajo de los 850 se quedan la Comunidad Valenciana, Canarias Castilla-La Mancha y Pensiones de jubilación


Tanto la distribución y como las diferencias entre comunidades son muy similares en el caso de las pensiones por jubilación que, sin duda, son las que más pesan en el sistema. Así, los jubilados del País Vasco tienen una mensualidad media de 1.306 euros, seguidos por los de Asturias, con 1.286 euros, Madrid (1.249 euros) y Navarra, en donde rozan los 1.200 euros.

En el lado contrario se encuentran, de nuevo, Galicia y Extremadura: sus jubilados tienen una paga de 872 euros en el primer caso, y de 878 en el segundo. Esto supone que la jubilación de gallegos y extremeños ni siquiera llega al nivel de la pensión media de todo el sistema, que está en los anteriormente mencionados 915 euros. En Murcia y Andalucia sí llegan a esta cantidad pero, aún así, se quedan muy lejos de las CCAA cuyos jubilados tienen mayores ingresos. Algo similar ocurre con la Comunidad Valenciana, Islas Baleares, Castilla-La Mancha, Canarias o La Rioja, que en todos los casos tienen pensiones por jubilación inferiores a los 1.000 euros.

Con estos datos, es evidente que existe una relación entre el tamaño y la evolución de la economía de cada región, y las pensiones medias de sus habitantes. Pero también es cierto que en este punto tienen importancia otros aspectos como las prejubilaciones o los pensionistas con condiciones especiales. Este es el caso, por ejemplo, de Asturias, que acumula buena parte de los jubilados de la minería del carbón que tienen una pensión media de 2.100 euros. Esta elevada cifra, que responde a las condiciones especiales de las que goza el sector, duplica la pensión media de jubilación nacional y, por lo tanto, eleva con fuerza la de la región.

En cuanto a la evolución de la pensión media nacional durante los últimos años, los datos del Ministerio que dirige Fátima Báñez muestran que ha pasado de los 678 euros en los que estaba en 2007, a los 915 de ahora. Esto supone un aumento de casi un 25% en los últimos 10 años. Más aun se ha visto incrementada la de jubilación, que tras aumentar un 37% en ese mismo periodo está ahora en 1.057 euros

Baleares, mientras que La Rioja y Castilla y León rozan los 900 euros.

8.660 millones en pensiones


Este progreso es el resultado de la llegada al sistema de jubilados que han tenido mayores sueldos durante su vida laboral y, por lo tanto, han cotizado por mayores cantidades. Esta es una tendencia que se está agudizando en los últimos años y que, de hecho, es la razón por la que el Gobierno aprobó en 2013 el factor de sostenibilidad, que limita a un 0,25% el incremento mínimo que marca la ley. La medida hará que los nuevos jubilados pierdan en los próximos años hasta un 30% de su poder adquisitivo pero, a cambio, ayudará a que el sistema sea viable.

Y es que el gasto de la Seguridad Social crece a un ritmo que las cotizaciones no pueden soportar. Según los datos de Empleo, el gasto en pensiones en febrero ascendió a 8.660 millones de euros, un 3% más que en el mismo mes del pasado año. Esto supone que el sistema lleva ya más de 14 meses creciendo a un ritmo superior a ese 3%. Por conceptos, el de jubilación es, por mucho, el que más presión ejerce en el sistema: cada mes son necesarios más de 6.000 millones para pagar las pensiones de los jubilados.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Por favor, todo comentario o escrito CONSTRUCTIVO, espero entre todos no avergonzarnos de ponernos al nivel de los que no queremos.
Gracias