jueves, 6 de agosto de 2020

Otro sarao sin ser la protagonista principal



Otra historia real que supera la ficción.

Ayer al mediodía cogí la villavesa (autobús urbano de Pamplona) para acercarme al centro para hacer una gestión.

Íbamos cuatro gatos como se suele decir, la conductora y otra empleada del bus, que seguramente había acabado su turno e iba de pasajera.

En dos ocasiones en el trayecto, dejando su bolso en el asiento se ofreció a ayudar a subir a dos sillas de minusvalía, bajando ella manualmente la rampa puesto que no se sabe porque no funcionaba el automático.

Me gustó su forma de actuar, de inmediato y sin pensarlo poniéndose manos a la obra.

Cuando ya la segunda silla estaba atada con los cinturones, el bus se puso en marcha.

El silencio agradable nos envolvía a todos.

Y de repente una mujer, sentada, se pone a gritar a una chiquilla que estaba bastante alejada de ella y por supuesto, sin nadie alrededor.

·       QUE TIENES LA NARIZ FUERA!

·       HAZ EL FAVOR DE SUBÍRTELA!

La verdad que más bien creía que le estaba dando un ataque de nervios a la mujer.

Pero no, lo que era una maleducada.

Su siguiente grito, a través de su mascarilla negra

·       TU, TU DEBER ES DECIRLE QUE SE LA SUBA!

·       ES TU TRABAJO!

Frases directas a la empleada fuera de servicio.

Ella se le vuelve y le dice “tranquila, ya se la ha subido”

A partir de ahí la susodicha mujer empieza a darnos una conferencia a limpio grito a todo el autobús.

·       ASÍ NOS VA!

·       SOIS INCAPACES TODOS DE MANTENER UN ORDEN!

·       DESPUÉS DE MAS DE 40.000 MUERTOS, QUERÉIS MAS.

·       SOIS TODOS UNOS IRRESPONSABLES INCAPACES DE SEGUIR LA NORMATIVA DE SANIDAD Y DEL GOBIERNO DE NAVARRA.

·       ME AVERGÜENZO DE TODOS VOSOTROS.

Y ya no me acuerdo de más, pero de verdad que seguía.

Un señor, el más próximo a ella le contesta “señora, ya está solucionado, cállese por favor”

Y entonces ya empezó a arremeter contra él.

Al sentir que se iba a montar una buena murga, reaccione a mi manera.

Me levanté para que no llegaran a más y le dije

“Por favor, se me ha olvidado el ibuprofeno en casa y me ha puesto Ud. un dolor de cabeza terrible, calle por favor”

Y conseguí que la pelota estuviera en mi tejado.

Dejó de lado al hombrico y entonces fue a por mí.

La lástima que debajo de mi mascarilla no viera la sonrisa que me provocaba.

Sé que tendría un mal día, pero nadie es quien para montar semejante cisco.

De pie, delante de ella, con 2 metros de distancia, conseguí que se desahogara contra mis huesos, y una parada antes de bajarme, estaba tranquilica y callada.

Toqué el timbre, el bus se paró y me baje diciendo en alto “LO SIENTO”, eran mis disculpas por el mal rato que nos llevamos todos.

A esto hemos llegado con este virus, a la mayoría se nos va la cabeza, lo malo es cuando lo demostramos en público.

Ya sé que me vais a decir que estoy en medio de todos los saraos, pero os prometo a mi favor que no los busco, ellos me huelen.

Una anécdota más para mis nietos.

2 comentarios:

  1. Me apunto a tus aventuras!
    Es mejor que el teatro o el cine!
    ¿Dónde puedo comprar las entradas?
    ¿Puede ser aventura de un fín de semana?
    ¡Espero contestación! Gracias!
    Saludos :)

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    Respuestas
    1. jajaja, te haré carnet VIP.
      Si salgo yo, sea lunes o domingo, seguro que hay movida.
      Gracias por tu apoyo!!!!

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Por favor, todo comentario o escrito CONSTRUCTIVO, espero entre todos no avergonzarnos de ponernos al nivel de los que no queremos.
Gracias