Los misteriosos tarros
gigantes que almacenaban cuerpos humanos
En los bosques
remotos, en las laderas, a lo largo de las cordilleras... había tarros en todas
partes. En el remoto centro de Laos, los arqueólogos
han descubierto más de un centenar de recipientes gigantes
hechos de piedra que tienen más de 1.000 años de antigüedad y que los expertos
creen que eran utilizados para guardar a los muertos.
Los investigadores
de la Universidad Nacional de Australia han hallado 15 nuevos sitios en Laos
que contienen estos misteriosos frascos, algunos de los cuales llegan a pesar
varias toneladas. La cuestión es que nadie sabe exactamente por qué se
eligieron específicamente estos sitios como lugar de descanso de los difuntos
que probablemente había en su interior.
Lo
que sí se sabe es que los recipientes fueron tallados en canteras lejanas y
transportados durante varios kilómetros hasta lugares “que solo han visitado,
de forma ocasional, los cazadores de tigres”, argumentan los especialistas. “Lo
que muestran estos nuevos sitios es que las antiguas prácticas de entierro
estaban más extendidas de lo que se pensaba anteriormente”, añaden.
Lo sorprendente es
que los lugares donde se han encontrado los 137 tarros no presentan evidencias
de ocupación humana. Eso dificultas saber qué pueblo o pueblos realizaron esta
práctica. ”Hemos visto frascos megalíticos similares en Assam (India) y en
Sulawesi (Indonesia), así que nos gustaría investigar posibles conexiones
prehistóricas entre estas regiones”, indican.
Las
excavaciones que se han realizado este año revelaron discos “bellamente
tallados”, que probablemente son marcadores de lugares de entierro que se
colocaron alrededor de los frascos. Curiosamente, el lado decorado -en el que
aparecen imágenes de figuras humanas, criaturas animales o formas geométricas-
fue colocado boca abajo.
”La talla
decorativa es relativamente rara en los sitios de los tarros y no sabemos por
qué algunos discos tienen imágenes de animales y otros tienen diseños
geométricos”, explica en un comunicado el doctor Dougald O’Reilly, codirector
de la expedición .
Entre
los artefactos típicos de la edad del hierro encontrados en estos lugares de
entierro (entre los que destaca la cerámica decorativa, cuentas de vidrio,
herramientas de hierro, discos usados en las orejas y rollos de huso para la
fabricación de telas) apareció un hallazgo particular que despertó el interés
de los investigadores.
“Curiosamente,
también encontramos muchos frascos en miniatura, que se parecen a los tarros
gigantes, pero están hechos de arcilla”, explican. “Nos encantaría saber por
qué estas personas representaron en miniatura los mismos frascos en los que
colocaron a sus muertos y los enterraron junto a los difuntos”, concluye
O’Reilly.
Una curiosa noticia sobre los misterios que nos depara la cultura y tradiciones en la lejana Asía.
ResponderEliminarUno de los últimos misterios de Asía tiene que ver con estos tarros gigantes tallados en roca sólida, que encierran múltiples incógnitas a los investigadores.
La presencia humana sobre la faz de la Tierra esconde muchos secretos que por ahora escapan a nuestros conocimientos sobre la vida de los antepasados. Pero no cabe duda que cada nuevo descubrimiento nos va acercando a conocer o especular sobre su existencia y diversos modos de vida.
Saludos:
Si, amigo, pero nosotros no se si llegaremos ya a saber mucho mas, jeje.
EliminarUn Abrazo y Buen Fin de Semana!