El elegante vagabundo Andrew Hyde
y sus "únicas" 15 posesiones
y sus "únicas" 15 posesiones
Andrew Hyde
se define como "vagabundo minimalista", dedicado entre otras cosas a
organizar conferencias TEDx y talleres de emprendimiento. Como nómada que es,
merece atención por esta foto, donde lo vemos con sus 15 posesiones:
Siendo estricto, no son exactamente 15
objetos. Además, estamos hablando de objetos materiales, y la presencia
de un smartphone y una notebook sugiere la existencia de objetos virtuales
(tema para otro artículo). Pero más allá de estos detalles, en esta foto se
pueden deducir varias características del nómada, como ser:
- Simplicidad (lo mínimo
indispensable, o al menos aceptable)
- Practicidad (que le lleve menos
trabajo para ordenar, guardar, mantener, etc.)
- Conocimiento de uno mismo
(para poder decidir y priorizar los objetos necesarios)
- Búsqueda del máximo rendimiento
Este último punto es importante, porque
apunta a la calidad y versatilidad de cada objeto elegido. Obsérvese, en
el listado y explicación del propio Andrew, que ningún objeto vale dos mangos. Tiene su lógica: cuanto mayor sea la
calidad-versatilidad, cada objeto puede utilizarse y dura (o debería durar)
mucho más. La contra: el costo.
Andrew corre con la ventaja de moverse en lo que llamo Norte (USA,
Canadá, Europa, Australia & Nueva Zelandia), donde tiene amplio espectro
para elegir objetos con calidad-versatilidad similar. No es el caso de quienes
vivimos en lo que llamo Sur, aún en las zonas que podemos considerar más
ricas. En ese sentido, para quien esté interesado quizás ayude la siguiente
foto, cuando Andrew comenzó su práctica minimalista:
¿Y cómo está Andrew hoy? Está más sedentario, y sus actividades lo fuerzan
a incrementar sus posesiones, al menos de ropa. Pasó de 15 a 39 objetos,
siguen siendo pocos, pero da para pensar en varias cosas:
Para terminar, mi curiosidad: ¿cómo
sería el mismo caso para una mujer? Para un hombre, de entrada, es más
fácil. Y en el caso de toda mujer, las necesidades y exigencias son mayores
(¡¡¡todo un tema para debatir y analizar!!!). Pero sospecho, considerando la
practicidad, entereza y originalidad de toda mujer, que los resultados serían tanto
o más interesantes que lo visto aquí.
Esta historia de Andrew Hyde y su filosofía de autoconsumo demuestra bien a las claras que para vivir necesitamos muy poquitas cosas a nuestro alcance.
ResponderEliminarHyde no abandono su profesión exitosa, pero si decidió cambiar por completo su estilo de vida. Se desprendió de cuanto consideraba posesiones no necesarias – incluido un domicilio físico – y llegó a la conclusión que para vivir feliz solo necesitaba unos pocos objetos.
Claro que para llevar una vida feliz, hoy en día, tampoco hay que llegar al extremo del minimalismo propuesto por Hyde, pero sí que estaremos de acuerdo en que la sociedad del consumo mantiene cierta obsesión por vivir rodeados de muchas cosas materiales o virtuales.
Y pese a disponer de tantos bienes a nuestro alcance, muchas veces sentiremos como que nos falta algo más. Pero la realidad es que si buscamos alcanzar la felicidad, no por los objetos materiales, sino dando a nuestra vida aquellas experiencias vitales que nos proporcionan la felicidad.
Saludos:
Así es amigo.
EliminarNos hacen creer que tenemos tantas necesidades, que jamas estamos felices
Un Abrazo!!!