Un sintecho ve el robo
a una mujer y logra detener a uno de los ladrones
Un
ciudadano argelino de 42 años que vive en el albergue municipal de Alicante
ayudó a la víctima de un asalto y dio alcance a uno de los ladrones en una
persecución por varias calles, tras ser testigo del robo.
Según la Policía
Nacional, la actuación de este sintecho permitió el arresto de ese
supuesto ladrón, en primer lugar, y facilitó la identificación y
posterior localización del segundo, un menor de edad, poco después, quienes
fueron puestos a disposición judicial y de la fiscalía de Menores por un caso
de robo con violencia.
Los dos hombres
habían, supuestamente, asaltado a una mujer, de 30 años, en plena calle
para arrebatarle de un tirón su teléfono móvil y, en un primer momento, ésta
les siguió para tratar de recuperar el terminal pero los detenidos se dieron la
vuelta y la amenazaron.
El argelino fue
testigo del suceso y acudió en ayuda de la mujer para perseguir a los
ladrones, y dio alcance al mayor de edad a varias calles, lo que
facilitó el arresto por parte de una patrulla de la Policía y que la víctima
recuperara su teléfono.
“Acaso soy libre si mi hermano se encuentra todavía encadenado a la pobreza.” Bárbara Ward Economista, periodista y educadora inglesa.
ResponderEliminarEste verano hemos visto por TV o en medios de comunicación, algunos hechos heroicos protagonizados por inmigrantes, muchos de ellos estando en el país en situación ilegal.
Personas que al encontrarse con otro ser humano con dificultades, no han dudado un segundo en acudir en su ayuda, y en muchos casos poniendo en riesgo su vida.
Seguramente el hecho de estar en situación de ilegalidad no hace que sean más valientes que otra persona nativa del lugar. Lo que de verdad tenemos que destacar es que dentro del colectivo de inmigrantes también hay personas buenas, solidarias y de gran corazón.
Seres humanos que salieron de su país huyendo de la pobreza, la miseria, las guerras y en busca de un mejor medio de subsistir en paz y armonía junto con los habitantes de los países que los acogen.
El valor puesto de manifiesto de este argelino al hacer frente a los asaltantes de la mujer merece ser recompensado por la sociedad, su determinación al ser testigo de un robo, demuestra su nobleza de espíritu y por tanto sus deseos de convivencia en paz lejos de su familia pero cerca de entre nosotros.
Salam Aleikum.
Asi es Jomaral.
EliminarPor mucho que nos intenten meter que los inmigrantes son todos malos, este tipo de hechos nos demuestran lo contrario. Abrazos!!!!