Capítulo
4: Más que un Plomero
Después de su
reciente pérdida del proyecto de la renovación, José decidió que era hora de
revisar su estrategia. Había asumido que hacer un buen trabajo sería
suficiente, pero la competencia y los precios bajos le recordaban que quizá
tenía que hacer algo más para diferenciarse.
Esa mañana,
mientras tomaba su café en el bar de siempre, recibió un mensaje de uno de sus
primeros clientes como autónomo, una mujer mayor llamada Elena. Le preguntaba
si podría pasar a arreglar un grifo en su casa. No era un trabajo grande, pero
José no lo dudó un segundo y se puso en marcha.
Cuando llegó a la
casa de Elena, notó que estaba algo decaída. Su esposo había fallecido hacía
poco, y aunque el grifo era un problema menor, José entendió que ella
necesitaba compañía tanto como ayuda con la fontanería. Mientras reparaba el
grifo, le fue contando anécdotas de sus primeros trabajos y, sin darse cuenta,
lograron compartir risas y recuerdos. Al final, Elena estaba tan agradecida que
le recomendó a sus vecinos y le prometió difundir su número entre las amigas de
su club.
Ese día, José
comprendió que tenía algo que sus competidores no podían ofrecer: el tiempo y
la dedicación de una persona que realmente se preocupa. No solo era plomero,
sino alguien que escuchaba, alguien que no tenía prisa por acabar el trabajo y
marcharse. Con esta idea en mente, decidió crear un lema para su nuevo negocio:
“Más que un plomero, un amigo en cada casa.”
Para probar esta
nueva idea, al día siguiente, José imprimió unas tarjetas de visita con el lema
y decidió regalarlas a todos sus clientes, grandes y pequeños. Se lo entregó al
carnicero, a la dueña de la frutería y hasta a la vecina que siempre lo miraba
curiosa desde el balcón.
Los trabajos
comenzaron a llegar, y aunque no eran grandes proyectos, José notó que cada
cliente recomendaba su número a familiares y conocidos. La gente ya no solo
contrataba a un fontanero; llamaban a José porque sabían que haría bien su
trabajo y, además, traería un poco de humanidad a cada visita.
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